BlogNegocios

El impacto del control en una empresa: ¿Cómo influye en su gestión?

¿Qué es el control en una empresa?

El control en una empresa es una de las funciones más importantes de la gestión empresarial. Consiste en la supervisión y evaluación de las actividades y procesos para garantizar que se estén cumpliendo los objetivos establecidos. El control es un proceso clave para asegurar que la empresa esté en camino de lograr sus metas y que se estén utilizando de manera eficiente los recursos disponibles.

Importancia del control en una empresa

El control en una empresa es crucial para su éxito a largo plazo. Permite a los gerentes y directivos identificar problemas o desviaciones en el desempeño y tomar las medidas necesarias para corregirlos. Sin un adecuado control, una empresa podría estar desviándose de sus metas sin que nadie se dé cuenta, lo que podría llevar a consecuencias graves como pérdidas financieras, deterioro de la reputación o incluso el cierre de la empresa.

Además, el control en una empresa también es importante para garantizar el uso eficiente de los recursos. A través del control, se puede detectar y corregir el despilfarro de recursos, optimizar los procesos y mejorar la productividad. Esto es fundamental para la competitividad y sostenibilidad de la empresa en un entorno empresarial cada vez más globalizado y exigente.

Tipos de control en una empresa

Existen diferentes tipos de control que se pueden aplicar en una empresa, dependiendo de los objetivos y las actividades que se quieran supervisar. Algunos de los tipos de control más comunes son:

Control preventivo:

Este tipo de control se enfoca en prevenir los problemas antes de que ocurran. Implica la implementación de políticas, procedimientos y controles internos para evitar desviaciones en el desempeño. Por ejemplo, políticas de seguridad en el trabajo para prevenir accidentes laborales.

Control concurrente:

Se realiza en tiempo real, mientras las actividades están en desarrollo. Permite detectar problemas de manera oportuna y tomar medidas correctivas de inmediato. Por ejemplo, la supervisión de la producción en una fábrica para asegurar que se esté cumpliendo con los estándares de calidad.

Control retroalimentativo:

También conocido como control de retroalimentación, se enfoca en analizar el desempeño pasado para identificar desviaciones y tomar medidas correctivas para el futuro. Por ejemplo, el análisis de los estados financieros para detectar tendencias que puedan afectar la rentabilidad de la empresa.

Proceso de control en una empresa

El proceso de control en una empresa consta de varias etapas que deben ser seguidas de manera sistemática para garantizar su efectividad. Estas etapas son:

Establecimiento de estándares:

En esta etapa, se definen los estándares o criterios de desempeño que se utilizarán para evaluar el cumplimiento de los objetivos. Los estándares pueden ser cuantitativos, como metas de ventas o de producción, o cualitativos, como estándares de calidad.

Medición del desempeño:

Una vez que los estándares están establecidos, se procede a medir el desempeño real de la empresa o de sus diferentes áreas. Esto se realiza a través de indicadores clave de desempeño (KPIs) que permiten comparar el desempeño real con los estándares establecidos.

Comparación y análisis:

En esta etapa, se compara el desempeño real con los estándares establecidos y se analizan las desviaciones. Se busca identificar las causas de las desviaciones y determinar si son atribuibles a problemas internos o externos.

Acción correctiva:

Una vez identificadas las desviaciones, se deben tomar acciones correctivas para corregirlas. Esto puede implicar cambios en los procesos, asignación de recursos adicionales o la implementación de nuevas políticas o procedimientos.

Seguimiento y retroalimentación:

Finalmente, es importante realizar un seguimiento continuo del desempeño, evaluar el impacto de las acciones correctivas tomadas y retroalimentar el proceso de control para realizar ajustes si es necesario.

Cómo implementar un sistema de control efectivo

Para implementar un sistema de control efectivo en una empresa, es importante seguir ciertos pasos y consideraciones:

Establecer objetivos claros:

Los objetivos de la empresa deben ser claros, específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un tiempo determinado (SMART). Esto facilitará la definición de estándares y la medición del desempeño.

Definir estándares de desempeño:

Es fundamental establecer estándares de desempeño que reflejen los objetivos de la empresa. Estos estándares deben ser realistas y prácticos, y deben estar alineados con la visión y misión de la empresa.

Implementar sistemas de medición:

Es necesario contar con sistemas de medición confiables y precisos para evaluar el desempeño. Esto puede incluir el uso de KPIs, software de gestión empresarial o sistemas de control de calidad.

Capacitar al personal:

El personal de la empresa debe estar capacitado en el proceso de control y en la utilización de los sistemas de medición. Esto garantizará que el proceso de control sea efectivo y que todos estén alineados con los objetivos de la empresa.

Establecer mecanismos de retroalimentación y comunicación:

Es importante que existan canales de retroalimentación y comunicación efectivos para que la información sobre el desempeño llegue de manera oportuna a los responsables de la toma de decisiones.

Realizar revisiones periódicas:

El proceso de control debe ser revisado periódicamente para asegurar su efectividad y realizar ajustes si es necesario. Los cambios en el entorno empresarial o en los objetivos de la empresa pueden requerir modificaciones en el proceso de control.

Desafíos del control en una empresa

A pesar de su importancia, el control en una empresa enfrenta varios desafíos que pueden dificultar su efectividad. Algunos de estos desafíos son:

Complejidad de los procesos:

En empresas grandes o con operaciones complejas, el control puede ser más difícil de implementar debido a la cantidad de actividades y áreas que deben ser supervisadas.

Resistencia al cambio:

La implementación de controles puede implicar cambios en los procesos y la forma en que se realiza el trabajo, lo que puede generar resistencia por parte del personal.

Falta de recursos:

En algunas empresas, la falta de recursos como tiempo, personal o tecnología puede limitar la capacidad de implementar un sistema de control efectivo.

Entorno empresarial dinámico:

En un entorno empresarial cambiante, los estándares y procesos de control pueden volverse obsoletos rápidamente, lo que requiere una adaptación constante.

Falta de compromiso de la dirección:

El compromiso de la dirección es crucial para el éxito del control en una empresa. Sin el apoyo de la alta dirección, el proceso de control puede no ser priorizado o recibir los recursos necesarios.

Conclusión

El control en una empresa es un proceso fundamental para garantizar que se estén cumpliendo los objetivos y que los recursos se estén utilizando de manera eficiente. A través del establecimiento de estándares, la medición del desempeño, la comparación y análisis, la acción correctiva y el seguimiento, las empresas pueden identificar desviaciones o problemas y tomar medidas para corregirlos. La implementación de un sistema de control efectivo requiere el compromiso de la dirección, la claridad en los objetivos, la definición de estándares de desempeño, la capacitación del personal y la revisión periódica del proceso. A pesar de los desafíos que enfrenta, el control en una empresa es indispensable para su éxito a largo plazo y para su competitividad en el mercado.

Bibliografía:

1. Robbins, S. P., & Coulter, M. (2012). Management. Pearson Education India.
2. Daft, R. L., & Marcic, D. (2010). Understanding Management. Cengage Learning.
3. Horngren, C. T., Datar, S. M., & Rajan, M. V. (2012). Cost accounting: A managerial emphasis. Pearson Education.
4. Drucker, P. (2007). The Practice of Management. Harvard Business Review Press.
5. Alvarez, R. (2011). El control de gestión en las organizaciones. Editorial UOC.
6. Anthony, R. N., & Govindarajan, V. (2007). Management control systems. McGraw-Hill Education.
7. Simons, R. (2000). Performance Measurement & Control Systems for implementing strategy. Prentice Hall.
8. Otley, D. (2016). The contingency theory of management accounting and control: A retrospective and prospective view. Research in Management Accounting, 17, 163-120.
9. Merchant, K. A. (2012). Management Control System. Pearson Education India.
10. Van der Stede, W. (2000). The relationship between organizational controls and culture. Management Accounting Research, 11(1), 113-135.
11. Ferl, G. (2000). Cost Management: Accounting and Control. South-Western Cengage Learning.
12. Bruns, W. J., Jr., & Kaplan, R. S. (2002). Accounting and management: A field study perspective. Accounting, Organizations and Society, 27(8), 675-687.
13. Govindarajan, V., & Anthony, R. N. (2007). The Theory of Constraints: Concepts and Applications. Harvard Business Review Press.
14. Hansen, D. R., & Mowen, M. M. (2005). Cost Management: Accounting and Control. Thomson/South-Western.
15. Kaplan, R. S., & Norton, D. P. (2008). The Execution Premium: Linking Strategy to Operations for Competitive Advantage. Harvard Business Press.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba
Cerrar