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Estatuto de los Trabajadores: Faltas y Sanciones
El Estatuto de los Trabajadores es la normativa que regula las relaciones laborales en España, estableciendo los derechos y obligaciones tanto de los empleados como de los empleadores. Uno de los aspectos más importantes que recoge este estatuto son las faltas laborales y las sanciones correspondientes.
Tipos de faltas laborales
Las faltas laborales se clasifican en leves, graves y muy graves, y se definen en el artículo 58 del Estatuto de los Trabajadores. Las faltas leves son aquellas que no perjudican de forma grave la actividad laboral, mientras que las faltas graves suponen un incumplimiento relevante de las obligaciones laborales. Por último, las faltas muy graves son aquellas que implican un grave quebranto de la buena fe contractual.
Sanciones correspondientes a las faltas laborales
Las sanciones por incumplimiento laboral también se encuentran recogidas en el Estatuto de los Trabajadores, en su artículo 58. Las sanciones leves pueden implicar desde una amonestación por escrito hasta la suspensión de empleo y sueldo por un máximo de dos días. En el caso de las faltas graves, la suspensión de empleo y sueldo puede ser de 2 a 20 días, y en las faltas muy graves, puede llegar a la suspensión de empleo y sueldo de 21 a 60 días, o incluso la extinción del contrato de trabajo.
Procedimiento disciplinario
El procedimiento para imponer una sanción por incumplimiento laboral se rige por lo establecido en el artículo 58 del Estatuto de los Trabajadores. Antes de imponer una sanción, el empleador deberá comunicar al trabajador la existencia de la infracción, así como la naturaleza de la misma y la posible sanción. El trabajador tendrá derecho a formular alegaciones y a defenderse de forma oral o escrita, y la decisión final deberá ser notificada por escrito.
Recursos ante la sanción impuesta
En caso de estar en desacuerdo con la sanción impuesta, el trabajador puede interponer un recurso en la forma y plazos establecidos. Este recurso podrá ser una reclamación administrativa, una demanda ante la jurisdicción social o incluso una mediación a través de la conciliación.
Conclusión
El Estatuto de los Trabajadores establece de forma clara y concisa las faltas laborales y las sanciones correspondientes, así como el procedimiento disciplinario a seguir en caso de incumplimiento. Es importante que tanto empleados como empleadores conozcan esta normativa y la apliquen de forma justa y equitativa, garantizando así el respeto a los derechos laborales y una convivencia laboral sana y armoniosa.
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